Imperdible: Thalia Zedek - "Been Here and Gone" (2001)
Cuando alguien se desentiende de ti en una relación amorosa, se da un vacío espeso como la inhalación de un asmático y agitado como una larva. Un cúmulo de energía nerviosa, mezcla de aturdimiento y puro temor, a la que solo das salida escarbando en el pasado con verdadero tesón. En nada, el repaso mental a los recuerdos se transforma en una necesidad física, y no es extraño sorprenderse dando pasos hacia lugares antes compartidos -o que fueron simplemente escenografía de lo cotidiano- en busca de alivio con el solo hecho de estar allí. Es una manera realmente curiosa de aferrarse a lo que ya no existe y pensar que con eso te sientes abrigado. Avanzar nos resulta tremendamente difícil. Escucho cantar a Thalia Zedek en este disco y me la imagino en ese estado que en el fondo nos hace tanto mal; todo ternura pero con una pátina de incomodidad perniciosa. Intuyo su búsqueda de simpatía y cariño, casi mendigado. Oigo cómo formula preguntas duras y explica conductas erróneas. Cómo pide