Escenarios: Russian Red + Lonely Drifter Karen - BcnMp7 al CCCB (Barcelona), 26 de junio de 2008

De manera inesperada, y por solo tres euros, el personal del CCCB camufló ayer bajo una etiqueta de "charla sobre los cambios en los medios de distribución y promoción de música" lo que en realidad fue un doble concierto en toda regla. Por una parte, se presentaban dos proyectos en forma de página web, http://www.blogotheque.net  (se filma a los grupos que están de gira por Francia tocando en ascensores, calles o comedores, proposición del fundador del proyecto) y http://www.blackcabsessions.com (dos británicos que meten a los artistas en un taxi y les filman tocando una canción en pleno viaje en el asiento de atrás), que con un lenguaje personalísimo están abriendo muchísimas puertas para la promoción desinteresada de la música de muchos artistas, extensión de redes sociales como Myspace. El colofón del coloquio eran actuaciones de Lonely Drifter Karen y Russian Red, pero lo que por intuición creía que sería un breve showcase de tres canciones por cabeza, acabó siendo repertorio de cincuenta minutos cada una.

En el CCCB se habilitó una sala con el suelo enmoquetado verde, puffs y ruedas de tractor hinchadas como asientos, y se llenó el escenario de lámparas rojas en forma de seta bastante resultonas. Lonely Drifter Karen, la banda de la austríaca Tanja Frinta, abrió el turno de conciertos poniendo en práctica lo que se había estado hablando en el coloquio: por una pantalla al fondo del escenario, pudimos ver como ella y sus músicos salían del camerino y paseaban por el museo hasta llegar al escenario, cantando y entrando por en medio del público -bastante numeroso, aprovecho para decir-, dejando claro el concepto de acercar la música a la gente de nuevo. En cualquier caso, a parte de terrenales, Lonely Drifter Karen pertenecen a otra época. y no solo porque Tanja lleve pantalón de cintura alta y calcetines blancos de encaje, ni por el aspecto canalla de antaño de los músicos que la acompañan (bajista y batería con gorra de golfete francés). Musicalmente, sus melodías y la manera que tienen de vestirlas remiten a algún pequeño club de los años 40, incluso 30, y la manera de contar las cosas, pequeñas historias de deseo inocente -aquellos tiempos en los que una señorita no lo enseñaba todo y quería que la sacasen a bailar-, también. Tanja tiene la presencia escénica de una Rosenvinge algo tímida y algo más rubia, y una voz impecable con la que sabe realizar pequeños tremolos como hacía Billie Holliday. Memorable y a tener en cuenta para futuras visitas.

Y luego, la segunda visita de Russian Red en menos de un mes. Esta vez pudimos disfrutar de Lourdes Hernández en formato reducido acompañada de Manu Cabezali a la guitarra, y puntualmente al xilófono y a la caja. A Lourdes se la ve todavía sorprendida ante la respuesta de la audiencia cuando se sube al escenario, y es de agradecer que no pierda esa frescura, esa risa nerviosa al finalizar un tema o el no saber encontrar las palabras para decir lo a gusto que está. Emocionó a metro y medio por encima de mi cabeza en el Primavera Sound y emocionó más si cabe ayer a tan cortas distancias, que permitieron disfrutar de la nitidez de esa voz y de la expresividad rotunda que le esta otorgando el gran número de conciertos que está haciendo este año. El repertorio también varió, rescatando 'Nice Thick Feathers' -una de las piezas más emotivas de su debut- e introduciendo temas inéditos en el repertorio, y ahí añado que esa fue la particular aportación de Russian Red a la charla central de la tarde, ya que muchos de esos temas ya son populares como los del disco a raíz de verlos repetidamente en medios como Youtube y Myspace, filmados por los fans. A destacar sobre todo la tensión y visceralidad de 'You Text', en la que Lourdes golpea rítmicamente la guitarra eléctrica mientras recita una declaración de amor con estribillo lleno de anhelo, y esa 'The Letters' infalible que cerró el set. Por suerte, tuvimos un breve bis en forma de 'Girls Just Wanna Have Fun'.