Escenarios: Vivian Girls + The Last Dandies - KGB (Barcelona), 30 de marzo de 2011

Sin desmerecer a las otras chicas, pero veamos: Cassie Ramone (guitarra, voz). Da lo mismo que rasgue durante dieciséis, veinticuatro compases un simple mi menor descacharrado a la guitarra eléctrica o que de repente se deslice hacia arriba en el mástil para atacar esos punteos que apenas repiten notas en su crescendo melódico. Esta chica es algo aparte, y para mí una imagen embelesadora y vehemente que no tiene competencia posible en su género musical. Lo dije cuando me sorprendieron en su anterior visita y lo voy a repetir ahora: hay algo muy tangible, real y creíble en Vivian Girls, y no se me ocurre nada mejor que decir de ellas Es una cualidad sólida que ayer destacó igualmente aunque el sonido en KGB no les hiciera justicia, al menos desde las primeras filas, donde solo era fácil seguir la voz si uno conocía las canciones y leía los labios para intuir las notas. En su nuevo álbum Share the Joy han potenciado una faceta más melódica y en cierto modo tierna que había asomado habitualmente en sus singles, pero ayer en Barcelona vimos un concierto quizás no tan acalorado y físico como el que dieron el verano pasado en Razzmatazz 2 pero igual de acelerado y estimulante. Abrieron fuego con una atropellada 'Never See Me Again', muestra de la fiereza punk de ese primer disco al que recurrieron para rescatar algunos de sus temas más emblemáticos como 'Wild Eyes' o el 'Tell the World' que cerró el set principal. 

De su entrega más reciente cayeron un total de siete temas que se impregnaron de la agresividad y las maneras del resto del repertorio, especialmente una dinamitada 'Lake House' y su versión de 'Sixteen Days' de Green On Red (y aquí aprovecho para mencionar a la mejor batería que hayan tenido hasta ahora, Fiona Campbell, y a la encantadora Katy Goodman, que con ese aire de simpatía y frescura puede hacer que la contundencia de su bajo sea percibida como algo ingrávido que sale sin esfuerzo). Intercaladas sonaron delicias varias: el jolgorio de 'Dance (If You Wanna)' en la recta final, todas esas historias que han aprendido tan bien de esa inocencia formal que esconde algo muy turbio de canciones como 'He Hit Me (And It Felt Like a Kiss)' ('Death', 'Take It as It Comes'), y medios tiempos más endulzados (la cara B 'Second Date') o sensibles ('Before I Start to Cry') que importan en su cancionero tanto como la vertiente más enfadada de su segundo álbum (y sonaron realmente enfurruñadas 'Survival' o 'I Have No Fun'). Pero dos momentos marcaron las cúspides en el concierto de ayer, y fue cuando acometieron los largos desarrollos de 'The Other Girls' y 'Out For the Sun': la primera, una reflexión casi etérea y la segunda, como en la anterior visita, una salvajada encabronada. En ambos temas fue cuando más pudimos disfrutar del encanto que comentaba que tiene Cassie en el primer párrafo. La gamberrada del bis sigue siendo la misma y muy agradecida: empalme de 'All the Time' con 'No' y adiós muy buenas.

Como teloneros cumplieron The Last Dandies, acompañados a los teclados y ocasional guitarra de Jordi Herrera (Satellites, The Marzipan Man), productor de su primer EP. Su actuación se vio lastrada por el mismo problema de sonido en la sala (en su caso excesivo volumen en los teclados y altos niveles en general), pero su rock tuvo interesantes incursiones en atmósferas algo oscuras y buena ejecución. La pose con gafas de sol del cantante en el último tema la dejaremos aparte.

setlist de vivian girls:

never see me again / can't get over you / i heard you say / the other girls / wild eyes / lake house / death / i have no fun / sixteen days / take it as it comes / survival / second date / out for the sun / before i start to cry / dance if you wanna / tell the world // all the time / no

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