Minutos: Superchunk - 'Watery Hands' (1997)



No lo hago con pánico ni excesivo nerviosismo, pero es habitual en mí añadir música al iPod rápidamente, a dedo y a granel, cuando sé que voy a estar más de dos días sin pisar mi casa. Es como asegurarme que voy a estar cubierto en caso de necesitar estar entretenido o de soportar un trayecto de tren más o menos largo, ya que leer no entra en la ecuación -porque no sé concentrarme para hacerlo en tal situación- y que, a fin de cuentas, sin música (en general) me convierto en alguien muy impaciente. 

Las elecciones de grupos a llevarme de paseo son tan apresuradas o arbitrarias que al final voy bajando la lista de nombres sin apetecerme que suene casi ninguno. La tarde del pasado miércoles, antes de irme de viaje tres días, tuve un flash de último minuto y añadí una recopilación -de esas que antes se hacía uno mismo en cassette- con los singles de Superchunk, y sin planearlo fue lo primero que sonó cuando me dirigía a la estación el jueves y de lo último que me puse cuando ya estaba llegando a casa el domingo. Son unas veinticuatro canciones que brotaron en un periodo de más de dos décadas, y por más que investigue en su discografía y por mucho aprecio que les tenga (son una de esas bandas de largo recorrido que desde siempre parecen honestas, humildes y abrazables sin esfuerzo) nunca he dado con una pieza que me emocione y me alegre más que la primera que escuché de ellos. Es de las canciones que provoca en mí cualquiera de las reacciones por excelencia ante un tema de pop sin fisuras: ganas de subir el volumen, bailar, cantar al unísono, sonreír o golpear una carpeta con los dedos pulgar y anular.

Fue por televisión, en algún momento de 1997 o 1998. Un videoclip para mí tan reconocible y representativo de la cultura indie rock americana de los noventa como el de Yo La Tengo para 'Sugarcube' (esa escuela de rock naïf). 'Watery Hands' hacía uso de un humor similar al de la banda de Hoboken y se mofaba del proceso y el resultado de hacer un videoclip en sí mismo, con los actores Janeane Garofalo y David Cross interpretando a dos directores que enseñan a la banda cómo ha quedado el montaje de imágenes hecho por ellos mismos, en el que aparecen rodeados de efectos absurdos y de mal gusto para desespero de los componentes.

Supe más tarde que 'Watery Hands' era la tarjeta de visita del que hasta entonces se había considerado (prácticamente de forma unánime) el disco más accesible y melódico de Superchunk, Indoor Living. A pesar de rodearse a menudo de guitarras enérgicas, la aguda voz de Mac MacCaughan (también guitarrista) siempre fue algo a parte en el estilo veloz que practicaban. Una sensibilidad melódica y una paleta emocional que, a mis ojos, les alejaba de la rama más evidentemente macho del punk-rock y les emparentaba con narradores de superficie turbulenta y fondo pop como Lou Barlow (no en balde ya habían versionado dos composiciones suyas, 'Brand New Love' y 'It's So Hard to Fall in Love'). A partir de mediados de los años noventa, Superchunk se lanzaron a explorar con más ahínco más allá de la velocidad hirviente y cierta actitud confrontacional.

Me sorprende enormemente que a penas la hayan tocado en sus conciertos después de presentar ese álbum, pues no tiene el aspecto de un single del que pudieran estar arrepentidos -planeado con alevosía para sonar en la MTV- y tampoco llegó a ser jamás el único tema que todo el mundo asociara con el grupo como para llegar a asquearles. Me parece que recoge magistralmente su personalidad añadiéndole un mayor gancho tarareable, sonando mucho más ligera (en el mejor sentido; entendemos los fraseos de guitarra mejor que en cualquier grabación pretérita) y rellenando la estructura de detalles que hacen de ella algo chispeante y estival (como ese diálogo entre el teclado Moog y el bajo de Laura Ballance). Es un gimoteo tierno y amigable dirigido a alguien con quien has roto, una de esas noches en las que la ausencia todavía no está superada y sigue emanando de ti un amor disfrazado de delicadeza casi infantil. Y a propósito de superar, difícil describir la situación con algo más precioso que soltar: 

cuando te vayas de esta costa, llévame contigo
porque no puedo vivir con tu fantasma, se parece demasiado a ti
está construyendo pirámides mientras hace esquí acuático,
y ambos sabemos que tengo las rodillas flojas
(...) 
estabas abajo, en la playa, con las rodillas rojas
y cuando soltaste tu áncora también me dejaste a mí
ahora mi bandera vuela triste
así que vuelvo a ti nadando

estás hecha de agua, yo de arena
no rechines los dientes
simplemente déjame besar tus manos acuosas



'Watery Hands' apareció como single y como parte del
álbum Indoor Living, ambos publicados en septiembre de 1997

Para escuchar en Spotify



Comentarios

Viola Tricolor ha dicho que…
Hola estanis, que letra tan bonita la de la canción, no la conocía, a superchunk nunca los habia escuchado a sabiendas hasta que fueron a un tanned tin, en el 2005 o por ahí. se me escaparon en los 90, a mi es una música que me gusta más para el directo que la verdad, son buenísimos.

un besote.
Estanis Solsona ha dicho que…
hola viola!
yo solo les he visto en directo en el primavera sound de hace un par de años y es verdad que estuvieron muy bien, tienen una solidez increíble. aún así, de las suyas a mí me gustan más las canciones con más cmatices como ésta. la letra no me la leí a conciencia hasta escribir esto y la canción aún ganó más peso del que ya tenía para mí :)

otro beso!